El INSST ha sacado una aplicación que calcula la atenuación del ruido que ofrece un protector auditivo con una exactitud media-alta a partir de los valores H, M, L que suelen aparecer en el folleto del fabricante y de los niveles de ruido globales ponderados A y C obtenidos a partir de la medición del ruido ambiental. 

Conforme a los principios de la acción preventiva, los riesgos derivados de la exposición al ruido deberán eliminarse en su origen o reducirse al nivel más bajo posible, teniendo en cuenta los avances técnicos y la disponibilidad de medidas de control. Cuando los medios organizativos y técnicos aplicados no hayan sido capaces de eliminar el riesgo, se utilizarán equipos de protección individual (EPI). 

 La utilización de protectores auditivos frente al ruido no implica la eliminación de la exposición, si bien la atenuación que proporcionan será determinante para valorar si se exceden los valores límite de exposición y para garantizar la seguridad y salud frente este riesgo, lo que confiere especial importancia a la selección adecuada de los mismos. Debe tenerse en cuenta que la atenuación que proporcionan los protectores auditivos depende de las prestaciones de los mismos, de su mantenimiento, de las características del ruido y del procedimiento de colocación del EPI. 

Los correspondientes valores de atenuación deben figurar en las instrucciones de uso que se adjuntarán con el mismo. A partir de ellos, se estimará la protección que ofrece el equipo en cada caso siguiendo alguno de los procedimientos indicados en las normas UNE EN 458 “Protectores auditivos. Recomendaciones relativas a la selección, uso, precauciones de empleo y mantenimiento. Documento Guía” y UNE EN ISO 4869-2 “Acústica. Protectores auditivos contra el ruido. Parte 2: Estimación de los niveles efectivos de presión acústica ponderados A cuando se utilizan protectores auditivos”. 

Para determinar si un protector auditivo es acústicamente adecuado, será necesario estimar el nivel sonoro efectivo de exposición continuo equivalente ponderado A (L´Aeq,T), cuando se utilice el protector en un ambiente caracterizado por un determinado nivel de presión acústica continuo equivalente ponderado A (LAeq,T), asociado bien a la tarea o en su caso a la jornada laboral completa. Para ello, se deben conjugar las características del ruido y los datos de atenuación de los protectores auditivos potencialmente adecuados. Para ruidos impulsivos la selección del protector está determinada, además, por el nivel de presión sonora de pico (LCpico). 

Existen cuatro métodos distintos que permiten estimar el L´Aeq,T, si bien cada uno de ellos ofrece distintos grados de precisión y necesita disponer de una información concreta para su aplicación. Estos son: 

• Método de bandas de octava. 
• Método HML. 
• Método de comprobación HML. 
• Método SNR. 

En caso de que existan ruidos impulsivos o fluctuantes con componentes impulsivas, además, habrá que comprobar el nivel de presión acústica de pico efectiva ponderada C (L’Cpico), para lo que se dispone del siguiente método: 

• Método destinado a determinar la atenuación de un protector auditivo para el nivel de pico.  

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